Perros de búsqueda en aludes

Una persona sepultada por un alud tiene pocos minutos de oxígeno. Los equipos caninos que trabajan en las estaciones de esquí están entrenados para la localización de personas sepultadas bajo la nieve a gran profundidad y desde grandes distancias, minimizando los tiempos, vitales en estos casos.

Las capacidades olfativas del perro, unido a su facilidad de desplazamiento, le convierten en la  herramienta más útil con la que contamos para la localización de personas en caso de que queden sepultadas bajo la nieve.

Los equipos caninos detectores de personas sepultadas deben estar están preparados en todo momento para salir a trabajar. Su entrenamiento es constante para lograr unas aptitudes físicas adecuadas y ejercitar su olfato.

También necesitan estar habituados a moverse en la nieve y a ser trasladados en los vehículos de transporte de las estaciones de esquí: telesillas, telearrastres, cabinas, orugas, motos de nieve o incluso entre las piernas del esquiador.