Crean un sabueso robot rastreador

Investigadores japoneses han creado un sabueso robot capaz de seguir un rastro de olor. ¿Podría ser el sustituto de los perros rastreadores en el futuro?

Según la descripción que da el American Kennel Club sobre el bloodhound: «el mundialmente famoso ‘Sleuth Hound’ hace una cosa mejor que cualquier otra criatura de la tierra, encontrar personas que se han perdido o que se esconden».

Y es que esta afirmación no tiene discusión. El olfato canino es una maravilla pero cuando hablamos del olfato canino de un sabueso, estamos hablando de la maravilla de las maravillas. Estos increíbles animales son expertos en rastrear diferentes olores durante largas distancias y son capaces de encontrar personas siguiendo su rastro. Incluso son capaces de seguir un rastro muchas horas después de la desaparición.

Pero son seres vivos y, como tales, tienen unas limitaciones. Los perros tienen que descansar y sobre todo, a veces es necesario rastrear en entornos peligrosos que podrían ponerles en peligro. Y precisamente con este fin la robótica trata de suplir o, al menos, igualar a los perros en el complicado asunto del olfato y el reconocimiento de olores.

Detecta olores en el suelo… ¡y es rápido!

Vivimos en la era de la tecnología y por eso ya no nos sorprende que un equipo de investigadores se dedique a crear un sabueso robot. Y así ha sido: investigadores de la Universidad de Kyushu en Japón, han desarrollado un sabueso robot que es capaz de detectar -y con rapidez- múltiples olores en el suelo. Como los de una huella química… o humana.

Ya conocíamos algún otro invento robótico olfativo pero sólo eran capaces de detectar los olores en el aire y eran bastante lentos.

Los investigadores Zhongyuan Yang, Fumihiro Sassa y Kenshi Haysashi, han basado su sensor olfativo en una técnica de detección química y biológica, conocida como Resonancia del Plasmón de la Superficie (RPS). Según Science Direct, la RPS es una oscilación colectiva de electrones de banda de conducción en nanopartículas de metal excitadas por la luz incidente electromagnética, que es ideal para aplicaciones de detección. Tras una exposición a un gas, el robot mide los cambios en la absorción de la luz por nanopartículas de oro. En definitiva, el robot «huele» y lo mejor de todo, rastrea un olor.

Imagen: American Chemical Society

¿Cómo funciona este sabueso robot?

El robot lleva un tubo cerca del suelo que aspira los olores y los lleva al sensor RPS, a medida que va moviéndose por una superficie. Los hallazgos del equipo mostraron que el sensor detectó correctamente las localizaciones de etanol en varios puntos a lo largo del camino que recorrió el robot. Y todo a la velocidad nada desdeñable de 4 pulgadas por segundo. Además, el sabueso robot leyó la palabra «olor» en un código de barras binario depositado en el suelo mientras se desplazaba.

Si bien nadie duda que este robot no puede reemplazar a un sabueso real, los investigadores aseguran que tiene el potencial para convertirse en una gran herramienta para detectar derrames químicos, por ejemplo. Allí donde los perros no pueden pisar o simplemente estar, este robot sería un buen sustituto.

También podría utilizarse como parte de un sistema de comunicaciones multi-robot o de un equipo de seguridad. Pero sobre todo, representa un nuevo avance en el desarrollo del mapeo de olores y el rastreo de feromonas. Y como la ciencia avanza sin descanso, seguro que pronto conseguirán mejorar el prototipo y acercarse un poco más al mejor sistema del mundo para el rastreo de personas: el olfato canino. Todos saldremos ganando.

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Fuente: engineering.com