Los perros podrían olfatear la malaria en humanos
Los científicos tienen la esperanza de que la utilización de perros entrenados podría revolucionar la forma de detectar la malaria en humanos, permitiendo identificarla rápidamente y sin pruebas invasivas.
Los perros pueden ser capaces de olfatear la malaria a través de su agudo sentido del olfato y, con ello, podrían salvar miles de vidas a través de la detección precoz y no invasiva, según afirman los científicos.
La fundación Bill and Melinda Gates ha concedido una subvención para la investigación de esta posibilidad a los científicos de la Universidad de Durhamn, Medical Detection Dogs y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, junto con sus homólogos en Gambia.
Se espera que estos animales sean capaces de detectar olores asociados con la enfermedad y que son demasiado sutiles como para ser identificados por el olfato humano.
Steve Lindsay, experto en el desarrollo de medidas de control de la malaria en la Escuela de Ciencias Biológicas y Biomédicas de la Universidad de Durham y principal investigador del proyecto, afirma que las recientes investigaciones han demostrado que los pacientes infectados con el parásito de la malaria producen un olor específico en su aliento que desaparece tras el tratamiento del parásito. También saben que los mosquitos de la malaria prefieren alimentarse en pacientes de malaria y están casi seguros de que les identifican por su olor.
Acabar con la malaria en humanos
Añade que si los perros fueran capaces de identificar individuos afectados por la malaria, podrían ser utilizados en el control de pasajeros que acceden a zonas libres de malaria pero susceptibles a la re-invasión. Utilizando perros para la detección de parásitos tiene la ventaja de que no es invasivo, es portátil, no necesita de un laboratorio, es totalmente funcional y puede utilizarse para poner a prueba una gran cantidad de muestras.
En 2015 hubo 214 millones de casos de malaria en todo el mundo y 438.000 muertes por causa de la malaria. Utilizando perros podríamos encontrar y tratar rápidamente a las personas con malaria y, por tanto, acelerar la velocidad con la que podemos acabar por completo con esta terrible enfermedad.
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