Perros que detectan salamandras en peligro

En Nuevo México están entrenando a perros que detectan la Salamandra Sacramento, una especie en peligro

Ruidoso, Nuevo México

En pleno proceso de remodelación de un tramo de la carretera de Nuevo México, los planes de comenzar se han visto truncados por la aparición de un curioso inquilino que correría un grave peligro si las obras continúan.

Se trata de la Salamandra Sacramento, una especie amenazada que sólo se encuentra en la «Tierra del Encanto» y por eso  las autoridades hacen lo posible por protegerla mientras comienzan los trabajos.

Los nuevos planes de la carretera incluyen una ampliación de los carriles y añadir un guarda raíl en tres de las curvas más peligrosas en el trayecto que discurre hasta la estación de esquí Apache Ruidoso. Mientras se realizaba el proyecto, los ingenieros se encontraron con las salamandras escondidas bajo las rocas o viviendo en el suelo.

Para evitar poner en peligro a estos pequeños anfibios, se ha pensado en utilizar una herramienta que los detecte a través del olfato. Esta herramienta se llama Sampson y se trata de un perro detector que viene desde Washington y que forma parte de un grupo llamado «Conservation Canines». Ahora Sampson está en Nuevo México olfateando en busca de la Salamandra Sacramento.

Según Anne Bradley, directora del programa Nature Conservancy Forest Conservation Program , no hay otra salamandra igual en ninguna parte del mundo.
Por este motivo, afirmó que harán lo posible por evitar que estas pequeñas criaturas sean arrasadas por las excavadoras.

El pasado miércoles, Sampson ya estuvo trabajando en la búsqueda de los anfibios en las zonas donde se realizarán los trabajos, junto a agentes de Caza y Pesca de Nuevo Mexico, del Servicio  Oficial de Fauna Silvestre, Agentes Forestales, biólogos y expertos de la Nature Conservancy. En tan sólo una hora, Sampson ya había localizado casi una docena de salamandras.

Según su guía Julianne Ubigau, los perros como Sampson están entrenados para encontrar especies de fauna silvestre y su única recompensa es jugar con una pelota. Y según afirman, son incluso más fiables que la tecnología.

No es la primera vez que «Conservation Canines» está en Nuevo México, ya hace dos veranos los perros estuvieron allí trabajando por todo el estado en la búsqueda de las Salamandras Jemez, una rara especie también en peligro de extinción.

Todas las salamandras que localicen Sampson y su departamento serán trasladadas a otra parte de la montaña.