¿Por qué mordió a la mujer el perro del DNCD?
Han pasado ya bastantes días desde que un perro del DNCD mordiera a una mujer en el aeropuerto. Aún no se sabe el por qué pero el incidente no debería quedar sin investigación
El pasado 23 de julio, una pasajera fue mordida por un perro de la Unidad Canina de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD). La mujer se encontraba en el salón de migración de salida del Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA) en Santo Domingo, chequeando sus documentos para tomar un vuelo hacia España.
Tras recibir el ataque del animal en su rodilla izquierda, la mujer fue trasladada de urgencia al dispensario médico de Salud Pública del aeropuerto, donde le proporcionaron los primeros auxilios. Allí los médicos confirmaron que la mordida le provocó una laceración de consideración profunda con pérdida de sangre.
¿De quién es la culpa?
Tras el incidente, la noticia comenzó a correr como la pólvora y llovieron opiniones de todo tipo. Muchos aseguraban que la mujer debió hacer algo extraño porque si no, no se explicaba semejante respuesta del perro.
Según la policía, la mujer afirma que el animal le fue encima cuando ella se dirigía a la casilla de migración. Sin embargo, el agente de la DNCD a cargo del perro explicó que el animal habría atacado a la mujer porque ésta se asustó y le dió varios manotazos.
Se han llegado incluso a leer y escuchar opiniones de supuestos expertos en perros de trabajo, que aseguraban que el perro pudo morder por alguna actitud de la mujer. «Porque le miró, porque le sonrió, porque el animal estaba estresado a causa de un exceso de trabajo, por ansiedad al frustrarle una acción y el perro reaccionó así al tener a la mujer al lado…»
Lo cierto es que en general, achacan la culpa del ataque a la propia víctima. ¿Es posible que tuviera la culpa?
La respuesta es simple: NO. No hay razón que excuse el comportamiento del animal. A no ser que la mujer le agrediera, cosa que en ningún momento se ha podido comprobar.
¿Había grabación o no?
La agencia de control de narcóticos explicó que el director general de la institución creó una comisión de oficiales del organismo para realizar las investigaciones de lugar y tratar de establecer qué pudo ocurrir. Aseguraron que revisarían las cámaras para estudiar la grabación de los hechos.
A día de hoy no hay noticia alguna sobre el resultado. No sabemos si es que no había grabación o que lo que se vio en el vídeo desmontaba todo lo alegado por quienes justificaban la agresión. Lo que es seguro es que si en la grabación se hubiese observado a la mujer pegando al perro, lo habrían difundido para eximir de culpabilidad al equipo canino.
En cualquier caso, si no se dispone de esa grabación, nos queda la duda de lo que pudo ocurrir.
La culpa no es del perro
Otro de los sinsentido que se han escuchado estos días es que había quien pedía que se sacrificara al animal. Esperemos que a nadie se le haya pasado semejante idea por la cabeza, no sin antes comprobar que realmente el animal tiene algún problema que no puede ser solucionado.
Al parecer ahora van a tratar y a evaluar al perro con un entrenador canino, para determinar cual fue la razón del ataque y reconducirlo.
Lo que hay que hacer es buscar al responsable o a los responsables de que esto haya ocurrido y evitar que se repita. Y que las autoridades de la DNCD den la cara con el resultado de la investigación y la supuesta grabación de los hechos.
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