¿Quieres enseñar a tu perro detector una focalización a prueba de bombas?

Una focalización absoluta, a prueba de bombas, es esencial en algunas disciplinas de detección con perros. Sobre todo si se trata de una especialidad operativa

Cuando los perros detectores localizan el olor diana, deben realizar alguna señalización para indicar a su guía dónde está exactamente. Y, según la especialidad, puede ser necesario que esta señalización implique una focalización absoluta: mirar fijamente el olor, con el hocico casi pegado y sin moverse. Esto es necesario ya que en ocasiones este olor diana es un objeto minúsculo, no apreciable a simple vista, o puede estar escondido o incluso puede ser invisible al ojo humano (por ejemplo, acelerantes del fuego).

Este tipo de señalización no es algo nuevo. Se utiliza desde hace muchas décadas, con diferentes nombres o simplemente sin asignarle un nombre propio. En realidad es un trabajo de ‘target’, que el perro aprende por asociación. Incluso en disciplinas no operativas, como la Detección Deportiva, los perros deben realizar una determinada señalización estricta: una focalización/marcación absoluta, casi pegado al objeto de olor, con la mirada fija y durante un mínimo de 3 segundos.

Entrenar esta focalización no es difícil pero requiere de una técnica que es necesario aprender para transmitirla al perro de manera correcta y lograr una ejecución eficaz. Hay muchas formas de trabajarlo y también diferentes objetivos según la necesidad. En algunos casos no será necesaria una focalización tan absoluta pero de lo que no hay duda es de que, cuanto mejor entrenada esté la focalización, mejores serán los resultados.

Una excelente focalización, válida para disciplinas detección

En PerrosdeBusqueda ya hace mucho tiempo que nos llamó la atención el trabajo que realizan en el Scandinavian Working Dog Institute, donde muestran unos trabajos fantásticos. Hay que resaltar que cuentan con un primer factor también fundamental: la selección de los perros para trabajar. El primer paso para obtener los mejores resultados. Y después, el trabajo en sí, donde siempre debemos buscar la excelencia.

Hoy vamos a mostrar aquí una serie completa de vídeos (de 2017) en los que se explica el proceso para el entrenamiento de esta focalización. Son 5 vídeos con 5 etapas. El objetivo es: «Sentado y congelado». Así lo llaman ellos, aunque mas que una denominación es una forma de explicar lo que hacen los perros cuando encuentran el olor diana. Sentarse y quedarse ‘congelado’, sin importar lo que vea, escuche o perciba alrededor. Y este debería ser el objetivo de cualquier trabajo de detección que implique focalizar dónde está el olor diana.

En el caso del SWDI, el trabajo lo inician empezando por la detección del kong (juguete). Y, sin lugar a dudas, es un trabajo excelente y muy efectivo. Pero hay que saber que también se pueden conseguir estos resultados sin necesidad de pasar por esa parte del entrenamiento con el kong, empezando directamente con el olor diana, ya sea la sustancia o un objeto a localizar.

Pero lo mejor es ver a los perros en acción:

Día 1

Día 2

Día 3

Día 4

Día 5