¿Robots o perros?

La eterna pregunta: Robots o perros ¿Son mejores los robots o los perros? ¿Podrán las máquinas reemplazar a los perros en las labores de búsqueda y detección?

Los avances tecnológicos son imparables y cada día nos sorprenden con una nueva invención que nos deja asombrados.

En el campo de la búsqueda y la detección ya existen muchos robots, máquinas muy perfeccionadas, que realizan estas tareas. Sin ir más lejos y lo que ahora mismo está tan de moda, los drones. De hecho, se están utilizando drones en las búsquedas de personas desaparecidas en campo abierto y sin duda son de gran ayuda.

Otro de los maravillosos inventos, que apareció hace ya algunos años y que no deja de mejorar año tras año, es la nariz electrónica , un artilugio que permite detectar olores con una precisión asombrosa.

Las cámaras térmicas y de infrarrojos también se utilizan desde hace mucho tiempo en operaciones de búsqueda de personas, en terremotos, en campo abierto… Porque además estos sistemas se pueden acoplar entre ellos, un buen ejemplo son los drones con cámara térmica.

Pero la idea de que estas máquinas pueden sustituir a los perros en operaciones de búsqueda y detección, aún es errónea y está aún lejos de ser real.

Los perros, los más efectivos

Actualmente y sin lugar a dudas, los perros son la herramienta que nos ofrece más garantías a la hora de realizar tareas de búsqueda y detección. Obviamente, siempre que sea posible la utilización de perros.

Tanto en búsqueda de personas sepultadas en escombro, avalanchas de tierra, barro o nieve, personas perdidas, los perros siguen siendo la mejor opción para obtener resultados en el menor tiempo posible.

También en tareas de detección de drogas, explosivos, acelerantes del fuego, billetes, aparatos electrónicos. Y sin olvidar a los más novedosos: los perros de alerta médica y biodetección, capaces de detectar la presencia de partículas de determinadas enfermedades en muestras de sangre, orina… O de avisar a una persona cuando va a sufrir un ataque de epilepsia o tiene una bajada de glucosa en sangre.

Y hay muchas más disciplinas de detección porque es tan sencillo como que si algo huele, puede ser encontrado por un perro.

 Robots o perros… Mejor perros y robots

Podemos decir por tanto que, a día de hoy,  el olfato y la capacidad canina en la búsqueda y detección es inigualable y no lo consigue reemplazar ninguna máquina. Pero también es cierto que la ciencia nos ofrece la posibilidad de complementar el trabajo de los equipos caninos y mejorar los resultados.

Y esto no debemos obviarlo. Por eso, la mejor opción es utilizar todo lo que tengamos a nuestro alcance para mejorar la efectividad en las operaciones de búsqueda o detección. Y así, obtendremos los mejores resultados.

Bienvenida la ciencia y que siga avanzando pero por ahora, nos quedamos con los perros detectores y los avances tecnológicos de apoyo.